Vino al mundo como Nilda Elvira Vattuone en Guaminí, en 1911, y fue una de las más perdurables artistas de la música popular argentina. Considerada una de las grandes voces femeninas del tango, fue quien inspiró “Malena” a Homero Manzi. A la caída de Perón, en 1955, debió partir al exilio. Su carrera resurgió recién en los años 90. Fue declarada Ciudadana Ilustre de la ciudad de Buenos Aires en 1996.