El 29 de Abril de cada año, desde 1982, por iniciativa del Comité de Danza Internacional del Instituto Internacional del Teatro (CID-UNESCO) se celebra en todo el mundo el “Día Mundial de la Danza”.
La intención de este día es reunir a todos los géneros de la danza para homenajear esta manifestación artística y su universalidad, que es capaz de atravesar cualquier barrera política, cultural o étnica y unir al mundo. La fecha elegida hace referencia al nacimiento de Jean-Georges Noverre (1727-1810), creador del Ballet Moderno.
Todos los años una personalidad de renombre mundial en la danza redacta un mensaje para esta ocasión. Este año lo ha escrito el coreógrafo australiano Stephen Page, considerado uno de los renovadores de vanguardia de la danza contemporánea internacional:
“La danza es la forma original, la más antigua de la expresión humana. A través del cuerpo y del lenguaje físico, la danza tiene una poderosa conexión con los mundos emocional y espiritual. En la cultura tradicional Aborigen, la danza es el alma, como una especie de medicina sagrada. La danza está enraizada en la tierra, conectada con el espíritu de la Madre Tierra. Mientras no te entregues a la danza no podrás cazar tranquilamente. Es una parte integral de la existencia humana (…)”