El médico William Griggs diagnostica que la hija y la sobrina del reverendo Samuel Parris están poseídas por el demonio. De este modo explica el comportamiento de las jóvenes, que en rigor podría haber sido producido por epilepsia o por consumo de un hongo, según investigaciones posteriores. Es el comienzo de la persecución religiosa en Salem, Massachusetts. Los juicios por brujería se suceden durante casi un año y medio y más de 150 personas son encarceladas. La cacería de brujas quedó como un símbolo del fanatismo religioso y sirvió a Arthur Miller para explorar a través de su obra teatral Las brujas de Salem el fenómeno del macartismo.