En Ciudadela nace Alfredo Alcón, una gloria del arte escénico en la Argentina. Brilló en teatro y en cine, así como en ciclos televisivos. En las tablas se lo vio en obras de Shakespeare, en Largo viaje hacia la noche de O´Neill, en Peer Gynt de Ibsen, en Los caminos de Federico, con textos de García Lorca. En cine fue actor fetiche de Leopoldo Torre Nilsson en films como Un guapo del 900, Martín Fierro, El santo de la espada, La maffia y Boquitas pintadas. También actuó en Nazareno Cruz y el lobo de Leonardo Favio y fue la voz de Cortázar de Tristán Bauer. Murió en 2014.