José Doroteo Arango Arámbula, conocido por su seudónimo Francisco Villa o por el hipocorístico de este, Pancho Villa, fue uno de los jefes de la Revolución mexicana reconocido como un icono popular de la cultura de México,23 cuya actuación militar fue decisiva para la derrota del régimen del entonces presidente Victoriano Huerta.3 Originario del estado de Durango,4 nació en la hacienda de Río Grande actualmente La Coyotada, San Juan del Río,4 el 5 de junio de 18785 y murió asesinado en una emboscada en Hidalgo del Parral (Chihuahua) el 20 de julio de 1923.6 Durante la revolución fue conocido como El Centauro del Norte.7
Comandante de la División del Norte,8 fue caudillo en el estado norteño de Chihuahua, el cual, dado su tamaño, riqueza mineral y también la proximidad a los Estados Unidos de América, le proporcionó cuantiosos recursos. Villa fue gobernador provisional de Chihuahua en 1913 y 1914. El dominio de Villa al norte de México terminó en 1915,9 a través de una serie de derrotas que sufrió en Celaya y Agua Prieta a manos de Álvaro Obregón y Plutarco Elías Calles. Después del ataque de Villa a Columbus, en 1916, el general John J. Pershing trató infructuosamente de capturar a Villa durante un año.
Villa y sus seguidores, conocidos como villistas, se apoderaron de las tierras de los hacendados para distribuirlas a los campesinos y soldados. Se apoderó de trenes y, como varios generales revolucionarios, usó dinero fiduciario impreso para pagar por su causa.
Aunque no se le aceptó en el panteón de los héroes nacionales hasta veinte años después de su muerte, su memoria se honra hoy por mexicanos, estadounidenses y personas de todo el mundo.10 Además, numerosas calles y barrios en México y otros países han sido nombrados en su honor.