Fue el más grande compositor del barroco alemán y una de las cumbres de la música universal. Destacó como organista y clavecinista y fue el patriarca de una fecunda familia de músicos. Entre sus obras destacan la Misa en Si Menor, las seis suites para cello solo, La Pasión según San Mateo, las Variaciones Goldberg, las cuatro suites para orquesta, los dos conciertos para violín, el concierto para dos violines, la Ofrenda Musical, la Toccata y Fuga en Re Menor, los seis Conciertos de Brandeburgo, el Magnificat, El clave bien temperado, El arte de la fuga y decenas de cantatas. Murió en Leipzig en 1750.