Fue uno de los más importantes y significativos representantes de la llamada Generación del 40 y de la poesía surrealista argentina; escribió la novela “Una sombra en la que sueña Camila O’Gorman”. Falleció en Buenos Aires el 13 de noviembre de 1997.
Enrique Molina fue uno de los más destacados cultores del surrealismo en la literatura de la Argentina. Tripulante de barcos mercantes, viajó al Caribe y a Europa y vivió en diversos países de América Latina. En 1952, con el poeta Aldo Pellegrini, fundó en la ciudad de Buenos Aires la revista surrealista «A partir de cero».
Como pintor, manifestación creativa que también ejerció, concibió apariencias en un espacio onírico, pureza y enigma que se relacionan íntimamente con su poesía.
Publicó, además de numerosos libros de poesía, la novela Una sombra en la que sueña Camila O’Gorman, inspirada en la historia de amor del sacerdote católico tucumano Ladislao Gutiérrez, que escandalizó a Buenos Aires en el siglo XIX y tuvo un final trágico.
En 1992 fue distinguido con el Gran Premio Fondo Nacional de las Arte y en 1994 con el Premio Konex de Platino.
«Es considerado hoy como uno de los poetas más importantes de la lengua española. Estudió abogacía, fue tripulante de barcos mercantes y residió en diversos países de América. Identificado con las ideas y los fines del movimiento surrealista fundó en 1952, con Aldo Pellegrini, la revista «A Partir de Cero».1Su estilo poético cerebral y en ciertos aspectos surrealista le hacen cercano a sus coetáneos y compatriotas Alberto Girri y Olga Orozco.